Un «actor estatal sofisticado» se encargó de hackear a los tres partidos políticos más grandes de Australia, según informó el primer ministro del país, Scott Morrison. El diario The Guardian publicó que los partidos Laborista, Liberal y Nacionales, recibieron ciberataques en sus redes, a tan solo meses de las próximas elecciones parlamentarias.
Este tipo de ciberataques tienen su precedente en el hackeo de elecciones de EEUU en 2016 y en Francia en 2017. Esta artimaña fue descubierta por el Centro Australiano de Seguridad Cibernética (ACSC) mientras investigaba un intento previo de violación del Parlamento. Pero ante el ataque, el ministro Morrison se tomó el tiempo para aclarar:
«El sistema político [de Australia] y nuestra democracia siguen siendo fuertes, vibrantes y están protegidos».
Según el jefe de la ACSC, Alastair MacGibbon no se ha podido confirmar si algún dato electoral ha sido robado durante el hackeo. Pero el líder del Partido Laborista, Bill Shorten, dijo que los partidos políticos se encontraban actualmente en el proceso de recopilar “grandes cantidades de información sobre votantes y comunidades”, antes de que lleguen las elecciones.
Por otro lado, Morrison se negó a confirmar la identidad detrás del ciberataque, pero The Sydney Morning Herald informa que los ataques llevan las huellas digitales de los agentes chinos. Sin embargo, es información no confirmada oficialmente.