La agencia de informes crediticios Equifax está a punto de llegar a un acuerdo para pagar alrededor de US$700 millones a reguladores estatales y federales para resolver las investigaciones derivadas del hackeo de Equifax, el mayor robo de información crediticia de la historia, que expuso la información personal de casi 150 millones de personas, según dos informes publicados.
Los fondos del acuerdo se destinarán a compensar a los consumidores por el costo de la brecha de datos de 2017, informaron el Wall Street Journal y The New York Times el viernes, citando a personas cercanas al asunto.
El hackeo, considerado el más grande en la historia de los EEUU, expuso información confidencial, incluidos nombres, números de Seguro Social, números de licencias de conducir y direcciones.
El monto del acuerdo podría cambiar dependiendo de la cantidad de reclamos que aún deben presentar los consumidores, dijo el Journal.
El acuerdo con la Comisión Federal de Comercio, la Oficina de Protección Financiera del Consumidor y la mayoría de los fiscales generales del estado también requiere más cambios en la forma en que Equifax maneja los datos privados de los usuarios, según los informes. Se podría anunciar tan pronto como el lunes.
Equifax reveló el hackeo por primera vez en septiembre de 2017, tres meses después de que la compañía descubriera la brecha.
Los hackers aprovecharon una falla de seguridad en una herramienta diseñada para crear aplicaciones web para robar datos de clientes. Equifax admitió que estaba al tanto de la falla de seguridad dos meses antes de que la compañía publicara que los hackers accedieron a sus datos por primera vez.
Se ha dicho que sus daños superaron los US$350 millones.
La violación de datos provocó la renuncia del CEO Richard Smith y las investigaciones de los reguladores federales, los fiscales generales de varios estados y la compañía enfrenta una serie de demandas civiles.